miércoles, 5 de junio de 2013


Publio Ovidio Nasón


Reseña.
Se dice que la cuna de la pasión fue la antigua Grecia. Este ímpetu llevó a la mayoría de los escritores a dedicarle textos en su honor. A raíz de esto puede explicarse la literatura grecolatina que, protagonizada por dioses y héroes, es influenciada por las ideas y costumbres que tenían. Generalmente, las obras creadas en épocas remotas son clásicos perdurables, pero del escritor poco o nada se sabe. Sin embargo, gracias a los textos podemos descubrir parte de la vida de su autor. Un ejemplo de esta situación la encontré al leer a Publio Ovidio Nasón (43 a.C – 17 d.C) pues, del lugar de nacimiento y de su vida se sabe poco y son datos dudosos, aunque su obra revela mucho de su personalidad y la manera en que vivía. Si bien la fecha de su natalicio es un misterio, su vida –y manera de pensar- queda al descubierto en la obra, considerada por muchos, la mejor escrita por su puño y letra: Arte de amar, un libro descriptivo en donde Ovidio les ofrece a los jóvenes pupilos suyos la manera correcta para conquistar al ser amado. Una ventana abierta hacia el mundo amoroso en la antigüedad. Consejos que sólo un poeta puede brindar en el arte del amor.
Al hablar de un poeta no sólo se aborda su vida pública, es necesario tratar o conocer de su vida privada para comprender mejor sus escritos, pero, cuando el artista es de una época remota resulta bastante complicado hablar sobre su vida pues los datos conocidos son,  la mayoría de las veces, muy escasos. De Ovidio –quien tratamos en esta ocasión- se sabe fue un famoso poeta romano educado en las artes de la política, la retorica y el derecho, por desgracia para su padre, éste pronto encontró en la escritura en verso la pasión que por las otras artes no sentía. A pesar de la insistencia de su padre por dedicarse a un oficio con el que no muriese pobre, Ovidio dejó pronto las academias políticas para dedicarse a escribir. Se cree que alrededor de los 18 años, y bajo la influencia de Tibulo y Propercio, escribió su primer libro de poesías dedicado a una joven llamada Corina (que tal vez nunca existió). Más tarde creó las llamadas Cartas de las heroínas (en latín Epistulae Heroidum) que supuestamente son cartas escritas por varios personajes femeninos como Ariadna o Medea. Desde sus comienzos como escritor, la figura femenina estuvo siempre presente como la base y pieza fundamental.
Tanto como las mujeres, el amor es protagonista en la mayoría de las obras de Ovidio. Se dice que tuvo numerosas amantes, que se casó en tres ocasiones y algunas de sus peripecias amorosas las plasmó en el Arte de amar (del latín Ars amatoria o Ars Amandi). Su año de publicación, al igual que todas las fechas referentes a los antiguos griegos, es incierta pero hay indicios de que fue entre el 2 a.C y el 2 d.C. Consta de tres libros (o cantos) en los que relata la manera correcta para conquistar, enamorar y cortejar al ser deseado. El primer libro es dedicado a los hombres. En él les da consejos para impresionar y convencer a su damisela. Dice, por ejemplo, que no se economice en prometer que al final no arruina a nadie y todo el mundo puede ser rico en promesas. Esta parte del libro suele ser conflictiva para los historiadores pues, aunque se sabe que Ovidio recibió la herencia de su padre, en el Arte de amar refiere que es pobre, como cualquier otro poeta, y por tanto escribe versos en lugar de dar regalos ostentosos. El segundo y tercer libro los analizaré un poco más adelante, por ahora me extenderé en el primero que es el que contiene más páginas, por ende el que otorga más consejos.
El vino es el eterno acompañante de las pasiones humanas. Hace que todo se vuelva más sencillo, nos da valor y hasta nos otorga el don de la palabra. Por eso Ovidio lo presenta como el asistente ideal para las noches de conquista. En el primer canto del Arte de amar se muestra como un sabio consejero en el ámbito amoroso. Además de sugerir la mentira para engatusar a la mujer amada, incita al adulterio y la violación con la justificación de que al final la dama, por muy fina y delicada que sea, caerá ante los encantos del amante. Parece mentira pero el machismo data de épocas muy antiguas. Si algún amante moderno quisiera tomar los consejos del sabio Ovidio, se metería en problemas serios pues actualmente el adulterio es causante de problemas legales. No obstante, a pesar de todo su conocimiento, técnica y táctica en las artes amatorias, el autor aparece como un amante común al que varias veces rechazaron. Además del vino, recomienda ser aseados a la hora de cortejar, pero no al extremo de embellecerse más que la fémina. Si Ovidio viviera se llevaría varios sustos al darse cuenta de que en la actualidad hay varones que se acicalan más que  sus propias pajeras.
Dentro del segundo canto encontramos los consejos pertinentes para, después de haber conquistado a la joven adecuada, conservar lo ya ganado. Entre otras cosas, comienza narrando las hazañas amorosas que Príamo logró gracias a sus consejos. La principal característica (o lema) de este segundo libro es el siguiente: “Por mi arte la conseguiste y mi arte te ayudará a conservarla” (Ovidio, 1980,  p53). A grandes rasgos esta parte del libro nos ínsita a ‘seguir la corriente’ para darle gusto a la persona amada, y dice también, que cuando ya se esté absolutamente seguro del amor de esa persona, el ausentarse ayudará a que el otro tenga la necesidad de busca, pero con esto se debe tener cuidado pues el tiempo hace olvidar hasta al más seguro de los amantes. Ya para el tercer libro los consejos son para las mujeres. Este libro es el menos extenso y los consejos son menos profundos que los anteriores. Tal vez, a pesar del vasto conocimiento del autor, nunca conoció por completo a las mujeres pues, aparentemente no sabe qué consejos otorgarles. La limpieza, el arreglo personal, los accesorios y la adecuada vestimenta son las recomendaciones que el poeta les hace a las féminas de su época.


El vino, la pasión, el engaño, la galantería y la mentira son las claves para llega a ser artista en el arte de amar. Esta es la primera etapa de la vida de Ovidio. Al alcanzar la madurez escribe Las metamorfosis, un extenso poema repartido en quince libros en donde narra la historia del mundo desde la creación hasta la deificación de Julio Cesar. En la mayoría de sus obras resaltaban la picardía, la sátira y el disfrute de las pasiones. Se cree, éste pudo ser el motivo por el cual se enfrentó con el emperador Cesar Augusto y fue exiliado a Tomis, dónde murió en el año 17 d.C. Sea cual sea el dato exacto de su nacimiento, vida y publicación de sus obras, el legado que dejó en la literatura con sus poemas es indudable. La vida y obra de Ovidio es la representación misma de que el amor es el centro y la razón de la existencia humana. Lo realmente difícil es reconocerlo y no confundirlo con los demonios que son bastante parecidos, como el deseo o la pasión. Puedo concluir, después de todo, que Publius Ovidius Naso (en latín) es el poeta del amor. Aquí tenemos, pues, sus consejos sobre como conquistar al ser amado, seguirlos depende de nosotros. 


Referencias: Nasón, P.O. (1986) El arte de amar. México: Porrúa.

Fatima Marisol Contreras Vázquez.

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